Puedes hacer planes de ahorro en solo 15 minutos al mes, ¿Sabías? En esta nota te contamos cómo lograrlo.
Seamos honestos: establecer un plan de ahorro y monitorear tus gastos es difícil. Puede llevar mucho tiempo, ser restrictivo y algo que siempre está en tu lista de tareas pendientes para mañana. Pero necesariamente debe ser así.
Cuando se hace bien, usar un plan de ahorro para tener control de tu dinero puede ser fortalecedor y ayudarte a alcanzar tus metas financieras con facilidad.
Incluso, te ayudará a planificar el derroche ocasional (¡sin culpa!). El concepto básico de un plan de ahorro es simple: gasta menos de lo que ganas.
Pero crear un presupuesto que sea a la vez empoderado y fácil de cumplir, es un poco más difícil. Sin embargo, aquí te compartimos los mejores tips para hacerlo en 15 minutos al mes, o menos.
Paso uno: revisa a dónde está yendo tu dinero
El primer paso para hacer un plan de ahorro es comprender a dónde va tu dinero actualmente. Para la mayoría de las personas, esta es la parte más difícil, pero la más gratificante.
Si es la primera vez que lo haces, descarga tus gastos de los últimos tres meses. Si ya lo has hecho antes, solo tienes que descargar los del último mes. Agrupa las cosas en categorías como:
- El dinero que ganas durante el mes, después de que se hayan deducido los impuestos.
- Necesidades: alquiler, servicios públicos, comestibles básicos, pago del carro, etc.
- Deseos: salir a comer, ir de compras, ser miembro de un gimnasio, Netflix, etc.
- Ahorros: fondo de emergencia, ahorros para compras futuras (como el pago inicial de una casa), jubilación
- Inversiones: el dinero que inviertes en fondos mutuos, acciones o ETFs.
Paso dos: observa cómo se comparan sus gastos con estas pautas
- No más del 50% de tus ingresos después de impuestos debe gastarse en necesidades.
- No más del 30 % de tus ingresos después de impuestos debe gastarse en deseos.
- El 20% restante para inversión y ahorro.
¿Cómo se comparan tus gastos mensuales con las pautas anteriores? Si no estás del todo encaminado, está bien. Cuando la mayoría de las personas realizan este examen de su presupuesto, se sorprenden al descubrir a dónde va la mayor parte de su dinero. Spoiler: comer fuera o las compras frívolas consumen más de lo que crees.
Si esta guía no funciona para ti, está bien que la ajustes con tu vida. Por ejemplo, puedes estar asignando menos a los ahorros porque estás pagando una deuda.
El punto es que estás mirando tus “necesidades” y asegurándote de que sean solo eso y revisando de que tus “deseos” no sean tanto que te impidan la seguridad financiera.
Paso tres: prioriza tus gastos
Tómate unos minutos para reflexionar, sobre lo que estás gastando y dónde estás gastando demasiado.
Si tu sección de “deseos” es el área problemática para ti, prioriza lo que estás gastando actualmente y ve qué te impulsa.
Es posible que seas víctima de pequeñas compras automáticas, como suscripciones o compras de café al paso, que se suman rápidamente.
Cualquier cosa que esté baja en tu lista de prioridades debe eliminarse, para seguir haciendo lo que está más arriba en la lista.
Paso cuatro: establece metas de ahorro
No todos los objetivos de ahorro se crean de la misma manera, lo que significa que algunos de los objetivos serán parte del 20% del depósito de ahorros y algunos de los objetivos serán parte del 30% del depósito de deseos.
Todos los objetivos relacionados con la jubilación, el pago de deudas (por encima de tu pago mínimo), un fondo de emergencia o el pago inicial de una casa deben incluirse en el cubo de ahorro del 20%.
Los objetivos relacionados con viajes o ahorros para una gran compra, como una computadora nueva, deben incluirse como gastos mensuales en tu cubo del 30% de “deseos”.
Puedes encontrar que las cantidades mensuales que estableces para estas metas de ahorro, en algunos casos, suelen ser demasiado agresivas, una vez que examinas tu presupuesto.
¡Está bien! Reajusta según sea necesario. Puede tomar algunos meses más ahorrar para esas vacaciones, pero darte cuenta de eso ahora te pondrá en un buen camino para alcanzar esa meta.
De acuerdo al tipo de ahorro que estés teniendo, una parte de ese dinero probablemente irá a una cuenta de ahorro y otra parte irá a tu cuenta de inversiones en la que podrás invertir en activos como fondos mutuos.
Paso cinco: automatizar todo
Ahora es el momento de hacer que tu plan priorizado sea lo más fácil de ejecutar posible.
Configura cuentas de ahorro separadas para cada una de tus metas. Y ten tu cuenta de inversiones separada y en un solo lugar para que sea más fácil de acceder.
Aprovecha unos minutos del mes para transferir la cantidad que deseas inmediatamente a cada cuenta.
¡Y listo! Estos minutos mensuales te permitirán crear un plan de ahorro sencillo y fácil de controlar.